Historia - Espacios Naturales Protegidos

La presencia humana en las sierras de Puigcampana y el Ponotx se remonta a tiempos prehistóricos, reflejándose en el paisaje a través de la riqueza patrimonial que las distintas civilizaciones han plasmado, mediante sus respectivos asentamientos, en este espacio natural protegido.  Así pues en el Paisaje Protegido encontramos restos de antiguos molinos braquiformes  y cerámicas del bronce que evidencian la existencia de asentamientos de la Edad de Bronce en las laderas del Puigcampana, dentro del término municipal de Finestrat, también encontramos una antigua torre de vigilancia medieval ubicada en el término municipal de Polop, conocida como el "Castellet", de la que actualmente solo se conserva la base, y  restos cerámicos relacionados con un probable asentamiento ibérico próximo a una estructura hídrica moderna, lo que denota que ésta pudiera tener un origen histórico más antiguo, presente en el término municipal de Benidorm.

Más recientes, aunque de elevado valor etnológico, son las masías; como la del “Mas de la Monja”, la “Casa de Dios”, el ”Mas de l’oficial” o la “Taberna Magoig”, los corrales; como los existentes en la “Casa del tío Tolo la Maiora”, las canalizaciones para el regadío; como las presentes en los sistemas hídricos de la “Bassa Carreres” o en el “Mas de la Monja”, y los abancalamientos de piedra seca, todo ello relacionado con la actividad agrícola y ganadera llevada a cabo durante siglos en las zonas menos abruptas del espacio protegido, y que constituyen elementos de gran relevancia en el particular paisaje de montaña que caracteriza esta zona,  destacando la presencia de uno de los monumentos del patrimonio preindustrial asociado al aprovechamiento de recursos naturales más representativos del Paisaje Protegido, el "Pouet del Puigcampana", pozo de nieve datado en el siglo XVIII, ubicado en la umbría del Puigcampana.